La ciudad se prepara para vibrar al ritmo de un fenómeno que trasciende la música. El festival Futttura demuestra su poder de convocatoria con un dato contundente: las búsquedas de alojamiento en Airbnb para sus fechas se dispararon un 90% interanual, confirmando que el festival Futttura impulsa el turismo en Buenos Aires de manera significativa.
El poder de los eventos masivos para atraer visitantes
Los grandes festivales y conciertos se han consolidado como motores clave para el sector. Según una encuesta de Airbnb en Argentina, más del 30% de las personas viajan específicamente por conciertos o festivales de música. Esta tendencia genera un flujo constante de visitantes que dinamiza no solo el turismo, sino también la gastronomía, el transporte y el comercio local, dejando un impacto económico tangible en las comunidades.
¿De dónde vienen los fanáticos del Futttura?
El interés por el evento es masivo a nivel nacional. Los datos revelan las cinco ciudades argentinas con mayor número de búsquedas de alojamiento para asistir al festival:
- Mendoza
- Córdoba
- Tucumán
- Rosario
- Neuquén
Pero la convocatoria traspasa las fronteras. Las búsquedas realizadas por viajeros internacionales crecieron un notable 40% interanual. Las principales ciudades de origen son:
- Montevideo, Uruguay
- Santiago, Chile
- Lima, Perú
- Asunción, Paraguay
- San Pablo, Brasil
El perfil del viajero: la Generación Z elige experiencias
La información demográfica es reveladora. La edad promedio de los huéspedes que reservaron para las fechas del festival es de 24 años. Este perfil Gen Z prioriza las experiencias culturales y de entretenimiento por encima de todo. Son una nueva generación de viajeros que elige destinos donde puedan integrarse a la vida urbana y compartir su paso por la ciudad en redes sociales.
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Un impacto que va más allá de los escenarios
Con su espíritu innovador, Futttura se posiciona como un símbolo de integración cultural. El interés por Buenos Aires está en claro ascenso y el impacto del evento podría extenderse más allá de sus fechas oficiales, generando un «efecto prolongado» en la ciudad. El auge de estos festivales refuerza una tendencia nacional: los eventos masivos son catalizadores de movimiento económico y social. Al atraer visitantes, no solo promueven la actividad turística, sino que también fortalecen la identidad cultural y consolidan a la Argentina como un destino vibrante en la región.