Con el objetivo de garantizar unas vacaciones tranquilas, el Gobierno nacional presentó el Plan Verano, un operativo articulado que desplegará mayores controles de seguridad en destinos turísticos de todo el país. La iniciativa, liderada por las carteras de Seguridad y Turismo, busca prevenir delitos y crear un entorno confiable para visitantes y locales.
Una articulación clave entre seguridad y turismo
El plan fue presentado por la ministra de Seguridad Nacional, Alejandra Monteoliva, y el secretario de Turismo y Ambiente, Daniel Scioli. Ambos destacaron la coordinación interministerial como un pilar fundamental para el éxito de la temporada.
Scioli subrayó la importancia estratégica de la seguridad:
“La seguridad y el orden en el espacio público son dos factores clave para impulsar el turismo nacional e internacional en todo el país. En un escenario confiable y previsible, el turismo se consolida como una actividad estratégica, que activa las economías regionales y genera puestos de trabajo genuinos”.
Detalles y alcance del operativo estival
El Plan Verano es un operativo concreto que se extenderá hasta el 9 de marzo de 2026. Su acción se concentrará en las zonas de mayor flujo turístico durante la temporada estival, con una presencia territorial reforzada.
Los dispositivos de control se multiplicarán en puntos estratégicos para asegurar la temporada turística segura. Esto incluye un mayor patrullaje y puestos de control en:
- Rutas nacionales y accesos a ciudades turísticas.
- Puntos turísticos emblemáticos (playas, centros históricos, parques).
- Nodos de transporte: terminales de ómnibus, puertos y aeropuertos.
La presencia se intensificará especialmente durante los fines de semana y en los períodos de recambio quincenal, cuando el movimiento de personas es mayor.
Un mensaje de confianza para el sector
La ministra Monteoliva destacó que el objetivo final del plan es que “los turistas disfruten sus experiencias” en cada destino que elijan. Este enfoque procura construir confianza, un elemento intangible pero crucial para la decisión de viajar y para la reputación de los destinos.
La implementación del Plan Verano para un turismo seguro envía una señal clara a los mercados emisores, tanto domésticos como internacionales, sobre el compromiso del país con la protección de los visitantes. Un entorno seguro es la base para que la actividad turística pueda desarrollarse plenamente, generando el tan mencionado impacto positivo en las economías regionales y en la creación de empleo.