La propuesta «Sabores de Yokavil en la FIT» cautivó a los visitantes de la Feria Internacional de Turismo. Catamarca desplegó los sabores ancestrales de sus regiones y la excelencia de sus vinos de altura, consolidándose como un destino gourmet imperdible.
En el espacio gastronómico y de Bodegas del Norte Argentino, el público pudo descubrir recetas con fuerte identidad provincial. Desde la región de Ambato hasta los Valles Calchaquíes, la oferta fue un viaje sensorial por la gastronomía catamarqueña.
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Los Sabores Ancestrales de Ambato
Localidades como La Puerta, El Rodeo, Las Juntas y Los Varela compartieron una cocina que combina técnicas ancestrales con ingredientes únicos. Los visitantes pudieron probar charqui, locro de maíz, tortillas a la parrilla y nueces confitadas.
La escuela UTHGRA Catamarca realizó un show gastronómico en vivo. Presentó platos emblemáticos como el estofado de pelones y el jigote, que despertaron el interés de los asistentes.
Una visitante, Rosana de Buenos Aires, comentó: «Es la primera vez que pruebo el jigote y me encantó, es como un pastel de papa, pero distinto por el sabor que le da el caldo. Fui a Catamarca […] y ahora quiero viajar para conocer los paisajes y más comidas de Belén».
«Sentí Yokavil»: Innovación desde Santa María
Rosa Pastrana, de Off Road Moto Bar, fue la encargada de presentar la experiencia turística «Sentí Yokavil». Sorprendió con propuestas elaboradas con productos de los Valles Calchaquíes como quinoa, tomates deshidratados, queso de cabra y arrope de uva.
Los platos incluyeron una masa con pimentón y sablé de pimentón crocante. El postre, a base de harina capia y nuez con turrón de malbec y muña muña, fue el broche de oro para esta demostración culinaria.
Vinos de Altura y Enoturismo
En el espacio de Bodegas y Vinos del Norte, el público disfrutó de degustaciones de los vinos imperdibles de la provincia. Bodegas como Michango de Capital Catamarqueña y Acialba de Santa María presentaron sus varietales.
Tinogasta estuvo representada por bodegas como Veralma, Kakan y Tierra de Volcanes. El vino «Alma de adobe» de Finca La Sala formó parte de la experiencia «Tinogasta tierra de sensaciones» de Catamarca Sensorial.
Francisco, otro visitante de Buenos Aires, expresó: «Estoy sorprendido con Catamarca, no sabía que tenían viñedos y los vinos que probé hoy son muy buenos […] Nos vamos con el mapa y toda la información para viajar a Tinogasta».
Coctelería con Identidad Local
Luciana Ponce de Leon, bartender de la escuela UTHGRA Catamarca, cerró la propuesta con coctelería de autor. Preparó una sangría blanca y una tinta «catucha» con vinos cabernet sauvignon locales, café de algarroba y almíbar de canela.